Las varices son venas hinchadas y retorcidas que
pueden verse bajo la piel. Aunque no suelen causar problemas de salud, en
ocasiones pueden provocar dolores y precisar de tratamiento. Os explicamos por
qué aparecen y cómo hacer ejercicio de forma regular, no permanecer sentado o
de pie durante mucho tiempo o elevar las piernas al descansar puede aliviar los
síntomas.
¿Por qué se forman las varices?
Las venas tienen válvulas que ayudan a mantener
la sangre fluyendo en una sola dirección hacia su corazón. Si las válvulas
están débiles o dañadas, la sangre puede detenerse y acumularse en las venas.
Esto hace que se hinchen, lo que puede conducir a la formación de varices.
Las varices (o venas varicosas) pueden ser
azules, rojas o del color de la piel. Las más grandes pueden parecer cuerdas y
hacer que la piel sobresalga.
De las piernas al recto: en qué partes del
cuerpo suelen aparecer las varices.
Por lo general, las varices se encuentran en los
muslos, la parte posterior y frontal de las pantorrillas o la parte interior de
las piernas cerca de los tobillos y los pies. Durante el embarazo pueden
aparecer alrededor de la zona interna del muslo, la parte inferior de la pelvis
y las nalgas.
Aunque suelen aparecer en las piernas, también se
pueden formar en otras partes del cuerpo. Las hemorroides, por ejemplo, son un
tipo de variz que se desarrolla en el recto. Las personas que tienen enfermedad
del hígado también pueden tener varices en la zona del abdomen.
Tener sobrepeso, estar embarazada y otros
factores de riesgo.
Las varices afectan a casi el doble de mujeres
que de hombres y esta incidencia suele aumentar durante el embarazo, en este
periodo, se bombea más sangre a través del cuerpo para ayudar al bebé. La
sangre adicional puede hacer que las venas se agranden y, al crecer, el útero
también ejerce presión sobre las venas. Las varices pueden aparecer alrededor
de la vagina y las nalgas.
También tienen un mayor riesgo de tener varices
las personas mayores o quienes permanecen sentados o de pie durante períodos
prolongados, llevan un estilo de vida sedentario o tienen antecedentes
familiares con várices o trombosis venosa profunda (se produce cuando se forma
un coágulo de sangre en una o más venas profundas del cuerpo).
Consejos para prevenir y tratar las varices
Aunque su aparición no puede evitarse por completo, ya que tiene un gran
componente genético, se pueden seguir algunos hábitos para mejorar la
circulación y prevenir las varices.
Se recomienda evitar usar zapatos de tacón muy alto
o planos con frecuencia y ropa ajustada, practicar ejercicio físico a diario,
evitar exposiciones prolongadas a fuentes de calor, mantener una alimentación
saludable, elevar los pies unos 15 centímetros para que descansen y utilizar
medias de compresión (que aplican una presión suave en las piernas para ayudar
a prevenir la hinchazón).
En algunos casos, las varices pueden afectar a la
calidad de vida. Para aliviar sus síntomas, los expertos consultados también
aconsejan adelgazar si se tiene sobrepeso u obesidad y no permanecer mucho
tiempo seguido de pie o sentado en casa y en el trabajo. Se aconseja tomarse un
descanso cada 30 minutos para ponerse de pie y caminar.
Las venas varicosas rara vez son una afección
grave y, por lo general, no requieren tratamiento. Se debe acudir al médico si
las varices causan dolor o malestar o perturban el sueño y si la piel sobre
ellas está irritada, también
si se experimenta pesadez, picor o edemas
(hinchazón) en la zona, si las varices son visibles, si la piel adquiere un
color marrón o ante la aparición de úlceras.
Si los síntomas perduran, existen varios tratamientos.
Entre los más comunes, la ablación endotérmica (que consiste en usar calor para
sellar las venas afectadas), la escleroterapia (se utiliza una espuma especial
para tratar las varices) y la extirpación quirúrgica de las venas afectadas.
El objetivo de estos tratamientos, es también
mejorar el aspecto de las varices y prevenir las complicaciones graves, como
las úlceras o llagas cutáneas, la trombosis venosa profunda, los cambios de
color en la piel y el sangrado.
Fuente: DKV
No hay comentarios:
Publicar un comentario