El objetivo del día es crear conciencia sobre la enfermedad y reducir el estigma contra quienes la padecen.
La enfermedad de Hansen (o Lepra) es una
condición dermatológica crónica y potencialmente discapacitante.
Esta enfermedad que marcó la historia desde
tiempos remotos, aún está vigente y es importante conocer sobre ella.
Al rededor del mundo, India es el país que
reporta más casos, seguido por Brasil y de ahí en adelante centro y suramérica.
24% de los casos presentan discapacidad grado 1 y
el 12% grado 2 (máximo) lo que significa un gran impacto sobre la vida,
considerando que afecta mayormente a la población laboralmente activa entre 15
y 45 años.
La enfermedad se desarrolla por la infección del
Mycobacterium Leprae o Mycobacterium Lepromatosis que son bacilos muy similares
al de la tuberculosis.
Habiendo entrado en contacto con la bacteria,
esta permanece solapada por mucho tiempo en el cuerpo del paciente. Cada
individuo infectado puede manifestar un espectro muy variado de signos y
síntomas; dependiendo de las características de respuesta inmune de su
organismo frente a la infección.
Pueden verse afectados varios órganos y afecta
principalmente la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías
respiratorias altas y los ojos.
Rara vez toca grandes órganos internos.
Para su transmisión es necesario un contacto
estrecho y prolongado (meses o años). No se transmite por un contacto único,
por ejemplo.
La mayoría de personas no desarrollan la
enfermedad, a pesar de haber estado en contacto con pacientes que la padecen.
Esto ocurre cuando el organismo se protege de la bacteria haciendo uso sus
mecanismos naturales de defensa.
Los pacientes que desarrollan la enfermedad se
consideran predispuestos e inclusive se han considerado factores ambientales
involucrados.
Afortunadamente esta enfermedad tiene cura y su
tratamiento es gratuito. Los centros de referencia realizan seguimiento y
dispensan el tratamiento de los pacientes.
El diagnóstico temprano es vital para evitar las
discapacidades que pueden ser permanentes o irreversibles (articulares,
oculares, etc)
Es clave también que los familiares y/o contactos
cercanos de cada paciente diagnosticado se acerquen al centro de atención en
salud para ser examinados con el fin de detectar precozmente otros casos que
puedan estar presentes en el núcleo cercano de los pacientes.