lunes, 25 de noviembre de 2013

25 de Noviembre: Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres

La Administración Regional ha creado una amplia Red de recursos de protección a las mujeres maltratadas: Casas de Acogida, Centros de Urgencias, Centros de atención a mujeres jóvenes, Teléfono gratuito de atención 24 horas y programas de asistencia jurídico-procesal y psicológica.
Quizá, por ello, Castilla-La Mancha sea la región española donde menos denuncias por malos tratos se retiran una vez presentadas por las víctimas.



Eres víctima...
·         Cuando tu novio, marido o compañero te golpea, te insulta, te amenaza, te hace sentir humillada, estúpida, inútil...

Eres una mujer maltratada
·         Si te impide ver a tu familia o tener contacto con tus amigos, vecinos...
·         Si no te deja trabajar o estudiar.
·         Si te quita el dinero que ganas o no te da lo que precisas para las necesidades básicas de tu familia...  
·         Si te controla, te acosa y decide por ti...  
·         Si te descalifica o se mofa de tus actuaciones...  
·         Si te castiga con la incomunicación verbal o permanece en presencia de los hijos, invitándoles a no tenerte en cuenta...  
·         Si te impone el acto sexual    
Ante un ataque violento
·       Si puedes salir,
vete a la comisaría más próxima y haz la denuncia.
·       Si el ataque es inevitable,
procura convertirte en un blanco pequeño. Protégete con los brazos la cara y la cabeza.
·        Concierta con tus vecinos/as una señal
para que llamen a la policía cuando necesites ayuda.
·        Si no puedes llamar a la policía o te impide salir,
abre puertas y ventanas, grita, pide socorro y llama a los/as vecinos/as, ¡no te calles!
·        Ten siempre a mano
los teléfonos que puedas necesitar.
·        Haz todo el escándalo posible,
en ello está tu salvación.
·        Enseña a tus hijos/as
a conseguir ayuda y a protegerse cuando comiencen episodios violentos.
·        Acostúmbrate a no llevar adornos
como cadenas o colgantes que pueda utilizar para estrangularte.
·        Registra las situaciones de violencia vividas,
con fechas y detalles. Apunta los datos de las denuncias realizadas, si es posible nombre y número de identificación del/de la agente que hizo el trámite.
·        Retén los datos de todos los testigos
de cada agresión y de los/as que te atendieron.
·        Guarda todas las pruebas de la violencia:
ropa rota o ensangrentada, armas, objetos destruidos, etc.
·        Toma fotos de las heridas, marcas o moratones,
con una cámara que deje constancia de la fecha y anota los datos de la casa en que imprimas el material. 

Qué hacer
·       Solicita ayuda
en el Centro de la mujer, Centro de Servicios Sociales o trabajador/a social más próximo a tu domicilio.
·       Si existen lesiones,
dirígete al consultorio médico, centro de salud o al servicio de Urgencia de los hospitales. Solicita copia del informe médico o del parte de asistencia.
·       Si has sufrido agresión sexual,
has de solicitar, además, revisión específica por si existiese riesgo de embarazo y/o enfermedad de transmisión sexual y pide asesoramiento al respecto.
·       Denuncia los hechos
en el cuartel de la Guardia Civil, Policía local, comisaría de Policía o Juzgado de guardia. Facilita todos los datos posibles sobre las circunstancias en las que se produjo la agresión, sin ocultar ni omitir detalles. Haz constar si has sufrido antes malos tratos. Pide una copia de la denuncia.
·       Solicita protección y el alejamiento
del agresor en el juzgado correspondiente (Orden de Protección), que podrá ser acordada por el/la juez/a.
·       Si permaneces en casa,
toma las medidas de seguridad necesarias, procediendo al cambio de cerradura, de teléfono, denunciando cualquier acoso por parte del agresor... Y si acudes a casa de familiares, amigos, o a algún centro de acogida, no facilites direcciones ni confíes en los "intentos de reconciliación tras el arrepentimiento. Vas a encontrar ayuda. 
 

ATENCIÓN
·       Si corres peligro,
puedes abandonar el domicilio familiar sin que te suponga pérdida de derechos, siempre que en el plazo de 30 días se soliciten MEDIDAS PROVISIONALES, o DEMANDA DE SEPARACIÓN en el juzgado.
·       Si no puedes regresar a tu domicilio
y no tienes a dónde ir, pide ayuda. La Policía o la Guardia Civil te acompañarán a recoger tus cosas personales y te informarán sobre las CASAS DE ACOGIDA y CENTROS DE URGENCIA donde serás atendida y alojada con tus hijos e hijas si los tienes.
·       Al salir de casa procura llevar contigo:
libro de familia, DNI, pasaporte, cartilla y tarjetas de asistencia sanitaria, tu nómina y la de la persona con la que convivas, declaración de la renta, documentación bancaria y tarjetas de crédito, dinero, llaves, informes médicos, ropa, medicamentos, libros de escolaridad tuyos y/o de tus hijos e hijas, agenda de direcciones, permiso de trabajo (en caso de no tener nacionalidad española), escrituras de propiedad, permiso de conducir... 
 

ESPECIAL ATENCIÓN A LOS MENORES
Si tienes hijos y/o hijas, los malos tratos también les afectan. Los/as profesionales que te atienden han de valorar el estado en que se encuentran (de salud, de atención, de escolaridad). Igualmente les repercuten las medidas legales que se deriven de tu situación familiar: establecimiento de visitas del padre o prohibición de las mismas, derecho a pensiones por alimentos, protección social, etc.

Existen recursos específicos para menores, donde puedes acudir para solicitar información o atención especializada:
·         Trabajadores/as sociales.
·         Departamento de Menores en las Delegaciones Provinciales de Bienestar Social.
·         Unidades de Salud Mental Infantil y Juvenil.
·         Equipos multiprofesionales de los colegios.


Si quieres ampliar información entra en el la web del Instituto de la mujer de Castilla la Mancha:   http://www.institutomujer.jccm.es/
También puedes mandar un E-mail a:  institutomujer@jccm.es

Fuente: Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha

domingo, 17 de noviembre de 2013

Decálogo para vivir más, mejor y más feliz


Adoptar un estilo de vida saludable depende, en gran parte, de la propia persona. Somos nosotros mismos quienes tenemos la mayor responsabilidad sobre nuestra salud. Adquirir una conducta saludable, o cambiar una no saludable por otra que sí lo sea, es un proceso activo en el que usted debe ser el protagonista y con el que va a aprender cosas nuevas.

En el proceso de cambio hacia un estilo de vida saludable son muy importantes sus creencias y valores, así como sus experiencias propias: intente sacar provecho de ellas. También las relaciones y normas sociales tienen influencia en nuestros estilos de vida, sean estos saludables o no, y tanto el entorno social como físico pueden determinarlas. Piense en cómo afrontar las posibles dificultades.

Un estilo de vida saludable es imprescindible para cuidar y mejorar la salud, y siempre debe preceder y acompañar a cualquier tratamiento médico. Si usted ha decidido cambiar a un estilo de vida saludable: ¡Enhorabuena! Vivirá más, mejor y más feliz.

1. La alimentación debe ser:
·         Suficiente, para mantener o conseguir un peso saludable.
·         Variada, comer un poco de muchos alimentos para evitar la carencia de nutrientes.
·         Equilibrada, comer todos los días alimentos de todos los grupos.
·         Segura, no correr riesgos y elegir alimentos de origen seguro, con atención al envasado correcto e íntegro.
·         Apetecible, cocinar bien es un arte y hay que cuidarlo.
·         No hay duda: elegir la dieta mediterránea.

2. El consumo de alcohol debe ser:
·         Cuanto menos, mejor.
·         Nada en embarazadas, niños ni si se va a conducir. 

3. Realizar actividad física
·         Hacer ejercicio, adecuado a la edad y a la condición física de cada uno, de forma regular.
      ·         Cualquier actividad cuenta, como subir por la escalera, etc.
      ·         Se aconseja 1 hora diaria al menos 5 días a la semana. 






4. Evitar el consumo de tabaco y otras drogas
·         Dejar el tabaco. El consumo de tabaco, es la causa evitable más importante de enfermedad y muerte en nuestro país.
·         Evitar los espacios contaminados por el humo del tabaco, ya que el tabaquismo pasivo es causa de diversas enfermedades.
·         Ninguna droga es saludable. 

5. Hacer un consumo racional de medicamentos
·         Siempre bajo la supervisión de un sanitario cualificado y siempre acompañado de un estilo de vida saludable. 

6. Cuidar la salud sexual
·         En este campo no hay que correr riesgos innecesarios.
·         Si se ha tenido alguna conducta de riesgo, hay que hacerse un estudio. Si se padece alguna enfermedad de transmisión sexual, evitar contagiarla a otras personas.
·         Disfrutar del sexo con salud. 

7. No abusar de tomar el sol
·         Con media hora al día es suficiente para cubrir nuestras necesidades fisiológicas.
·         Las radiaciones solares se acumulan a lo largo de toda la vida, hay que protegerse adecuadamente. 
 
 

8. Conducir de una forma responsable
·         Abstención absoluta de alcohol si se va a conducir.
·         Usar el cinturón de seguridad en coches, el casco en motos y bicicletas, y las sillas para niños.
·         No usar el teléfono móvil cuando se está conduciendo. 

9. Tener una actitud positiva ante la vida
·         Tomarse las cosas con calma y evitar el estrés.
·         Descansar lo suficiente.
·         Buscar un sentido a la vida, una pasión, un propósito, una ilusión que nos impulse a levantarnos todos los días. 

10. Participar en la comunidad
·         Conectar con las demás personas, practicando la autoestima positiva.
·         Pertenecer a su comunidad. Una buena integración social y participativa, procurando tener unas relaciones sociales cordiales, nos ayudará en nuestra salud psíquica.
·         Reírse, la risa tiene poder curativo.


Fuente: Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria 

lunes, 4 de noviembre de 2013

Prevenir y tratar la incontinencia de esfuerzo



¿Qué es la incontinencia de esfuerzo?
Incontinencia urinaria que se produce a raíz de esfuerzos físicos bruscos como toser, estornudar, reír, levantar peso o hacer ejercicio. Normalmente se trata solamente de pequeñas pérdidas y suele estar relacionada con el debilitamiento de los músculos del suelo pélvico.

¿Por qué se produce?
En la incontinencia urinaria de esfuerzo, los músculos pélvicos del esfínter, que sostienen la vejiga y uretra, están debilitados. El esfínter no puede impedir el flujo de orina cuando se ejerce presión sobre el abdomen (como cuando uno tose, se ríe o levanta algo pesado).

La incontinencia urinaria de esfuerzo puede presentarse a raíz del debilitamiento de los músculos pélvicos que sostienen la vejiga y la uretra o debido a que el esfínter uretral no está funcionando correctamente. El debilitamiento puede ser causado por:
·         Parto
·         Lesión en el área uretral
·         Algunos medicamentos
·         Cirugía de la próstata o del área pélvica
                                                                   
¿Quien la padece con mayor frecuencia?
Se calcula que entre el 10% y el 12% de las mujeres padecen normalmente incontinencia urinaria, aunque su incidencia es muy superior en algunos grupos. La forma más habitual de incontinencia urinaria en mujeres es la incontinencia de esfuerzo. Esta variedad viene seguida por la incontinencia de urgencia. Muchas mujeres padecen ambas formas de incontinencia con una mezcla de síntomas. 

A esto no son ajenos los hombres que también la padecen pero en menor proporción. Los ejercicios del suelo pélvico son válidos para ambos sexos, adjuntamos una tabla para que se practiquen.