domingo, 15 de diciembre de 2013

Recomendaciones sobre Alimentación en Navidad I

Las urgencias e ingresos hospitalarios aumentan en Navidad, debido fundamentalmente a crisis hipertensivas, diabetes descompensada, ataques de gota y diversas patologías digestivas relacionados con excesos alimentarios. Además, algunas enfermedades neurológicas, como la epilepsia, se ven peligrosamente influenciadas por la ingesta de alcohol o la falta de sueño.
Casi tan abundantes como las recetas culinarias y las ofertas de exceso alimentario y alcohólico, son las “recetas” para que tales excesos no produzcan los estragos metabólicos previsibles. Muchas de estas recetas carecen de fundamento científico y, en bastantes casos, tienden a complicar o incluso agravar la situación. Por ello, siempre es preferible echar mano de las recomendaciones de los expertos, basadas en la investigación científica más rigurosa. En este sentido, la mencionada Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición SEEN, junto con la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) han propuesto una especie de decálogo conteniendo consejos y pautas saludables para estas fechas, aunque bien podría generalizarse para el resto del año:
1.     No cambies tus hábitos de alimentación y ejercicio habituales. No debes saltarte ninguna toma y mantener una regularidad horaria en las mismas. Reserva los “excesos” para las fechas más señaladas.
2.    ¡Muévete! Con treinta minutos más de ejercicio físico diario podemos compensar las calorías extras de las comidas navideñas.
3.    Controla el alcohol que tomas ya que aporta calorías vacías.
4.    Planifica el menú. Si el plato principal es muy graso (ej. cordero) se deberán preparar entrantes ligeros (ej. vegetales).
5.    Planifica la compra para evitar las sobras.
6.    No dejes de tomar fruta. Puedes preparar como postre y/o sobremesa bandejas con frutas tropicales o entrantes como ensaladas o brochetas de fruta.
7.    Mientras cocinas evita los picoteos.
8.    Sustituye las salsas industriales (muy grasas) por salsas caseras a base de hortalizas, hierbas aromáticas, jugo de limón, yogur desnatado y vinagretas.
9.    Elabore postres caseros reduciendo el contenido de azúcar (se puede sustituir con edulcorantes) y grasas. 
10. “De todo, pero poco”. Si quieres comer de todo lo que hay en la mesa, sírvete en un plato pequeño cantidades de todo lo seleccionado y no repitas.

 Estas útiles recomendaciones, pueden complementarse con otras para combatir o prevenir algunos problemas puntuales. Por ejemplo, es conveniente que tras la ingesta de alcohol se ingiera agua en cantidad abundante antes de ir a dormir, aunque ello implique tener que levantarse de la cama durante la noche (o parte del día) para acudir al servicio. Esta medida facilita la depuración del alcohol presente en la sangre y, sobre todo, la aceleración de la eliminación de su principal metabolito neurotóxico, el acetaldehído, responsable de la mayor parte de los efectos de la “resaca”. A la mañana siguiente del exceso alcohólico resulta tonificante para el aparato digestivo tomar una infusión de hierbas aromáticas y preferiblemente menta, poleo o similares, seguido una dieta láctea suave y si fuera necesario (cefalea) algún analgésico (paracetamol, etc.).

Asimismo, es muy frecuente caer en el error de llegar a la comida o a la cena con un ayuno de muchas horas, con la vana esperanza de “compensar” el previsible exceso alimentario. El error es importante, ya que, lejos de evitar tal exceso, en realidad lo facilita. Un ayuno prolongado reduce la glucemia y en estas condiciones se incrementa la producción endógena de insulina, lo que se traduce en un aumento del apetito, y una absorción y metabolismo glucídico más acelerado. Por lo tanto, ante una comida previsiblemente copiosa, lo mejor es desayunar adecuadamente e, incluso, tomar un ligero tentempié antes de la comida – y, si puede ser a base de fruta, mejor –, para reducir el apetito y la ansiedad.

Recomendaciones sobre Alimentación en Navidad II

Comidas fuera de casa
Durante las celebraciones navideñas es más frecuente hacer alguna comida o cena fuera del hogar. Esto no debería ser óbice para perder o modificar los hábitos dietéticos saludables, aunque realmente esto no sea fácil ante un ambiente que invita justamente a todo lo contrario. En cualquier caso, siguiendo las recomendaciones de la SEEN y la SEEDO:
·     En la mayoría de los casos los aperitivos pueden llegar a aportarnos las mismas calorías que el plato principal. Deberás tomarlos con moderación o evitar aquellos que lleven salsas (mayonesa, nata…), mantequilla, quesos untables o rebozados.
·     Intente comer la misma porción, como si estuviera en casa.
·  Si le ponen más cantidad no dude en pedir que le retiren lo que no se vaya a comer.
·    Elige carnes magras, sin salsas ni rellenos y elimine la piel. Si hay varias opciones siempre será más recomendable el pescado que la carne.
·     Sustituye postre o licores por café o infusión.

No solo de pan vive el hombre…
No solo es conveniente controlar el apetito y las consecuencias de éste.
No menos importante es atender a las cuestiones estrictamente psicológicas, sobre todo en lo que respecta al estrés que estas celebraciones suponen para muchas personas, desde perspectivas muy diferentes: echar de menos a familiares o amigos ausentes o desaparecidos, organización de ágapes familiares, compras, dificultades económicas sobrevenidas, etc.
Tal situación de estrés puede mermar la capacidad de respuesta del sistema inmunológico del organismo, haciéndolo más susceptible de padecer diversas patologías, como procesos infecciosos (gripe y otros cuadros virales), migrañas, etc. Para reducir este riesgo, parece aconsejable, en la medida de lo posible, evitar, en los encuentros familiares y sociales, cualquier tema que se considere susceptible de generar polémica (política, negocios comunes, etc.), sin olvidar que, en último extremo, siempre existe la opción de abandonar la reunión, como mejor alternativa a la pérdida de control propia y/o ajena, frecuentemente facilitada por el exceso de alcohol y tabaco. 

…Y después, ¿qué?
No siempre el esfuerzo preventivo se ve recompensado por los resultados. Más frecuentemente de lo que sería deseable, nos encontramos con que nuestro peso se ha “desviado hacia arriba” y pasa a “acompañarnos” el resto del año, hasta llegar al siguiente exceso alimentario. En realidad, podemos intentar romper esta especia de círculo vicioso, mediante sencillas – aunque no fáciles – medidas relativas a nuestros hábitos de vida cotidianos. Según datos recientes, la obesidad infantil en España supera ya a la registrada en Estados Unidos, mientras que un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que el 65 por ciento de los españoles tiene sobrepeso (dos de cada tres), en tanto que en 1998 rondaba el 35 por ciento.
Nada como una alimentación saludable bien planificada para encontrar el equilibrio metabólico y, también en buena medida, el psicológico. En cualquier caso, el inicio del nuevo año es siempre un buen momento –tanto como cualquier otro – para adoptar, como indicábamos en el párrafo anterior, una serie de sencillas medidas, que pasan por adherirse a algún tipo de actividad física programada (gimnasio, clubes deportivos, etc.), incrementar el consumo de fruta y de verdura, incluso entre las comidas principales; se debería evitar tanto los periodos de ayuno prolongados (hacer cinco comidas a lo largo del día, en lugar de tres) como el picoteo, entendido como el consumo de aperitivos y “snacks” con alto contenido calórico y deficientes desde el punto de vista nutricional; incrementar el consumo de pescado blanco y de carnes magras (poco grasas, como el pollo o el conejo), aderezados preferiblemente sin salsas; reducir algo el tamaño de las raciones (para ello, puede resultar psicológicamente favorable utilizar platos más pequeños; de postre, por ejemplo); beber abundante agua a lo largo del día, en detrimento de las bebidas alcohólicas, azucaradas y/o gaseosas. 

Fuente: Punto farmacológico nº 61- C.G.C.O.F.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

La cadena de supervivencia

         USTED PUEDE SALVAR UNA VIDA 

Si usted se encuentra con una persona inconsciente, que no respira y no tiene pulso  active la cadena de supervivencia:

1- Ante una emergencia, pida ayuda, llame al 112.

2- Comience las maniobras de Resucitación Cardiopulmonar (RCP).

3- En cuanto tenga el desfibrilador, conéctelo, analice y desfibrile.

4- Si no se dispone de desfibrilador continúe con las maniobras de RCP, hasta que acuda el soporte vital avanzado. 
 
En los siguientes videos podrá aprende las maniobras de RCP (Reanimación cardiopulmonar)
 
Cadena de supervivencia - Cardioprotección:
 
RCP básica pasos a seguir:
 
 

domingo, 1 de diciembre de 2013

1 de Diciembre: Día Mundial del Sida. Hazte la Prueba


El Día Mundial del Sida (DMS), conmemorado anualmente el 1 de diciembre, está destinado a la concienciación pública sobre la infección por el VIH. Cuenta con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para el SIDA (ONUSIDA), y de todos los agentes implicados en la respuesta a la epidemia Administraciones públicas, profesionales sanitarios,  sociedad civil (incluidas las ONGs) y sociedades científicas.

El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad a través del Plan Nacionalsobre Sida, diseña e implementa anualmente una campaña en esta fecha,  con la colaboración de las CCAA, dirigida a la población general.

Según los datos de vigilancia de epidemiológica disponibles  se estima  que actualmente viven en España entre 130.000 y 160.000 personas con infección por el VIH, de las cuales aproximadamente el 30%, desconocen su situación porque no han sido diagnosticadas. Esto supone un problema de salud pública por varias razones:

·       No les permite beneficiarse precozmente de los tratamientos disponibles
·       Aumenta el riesgo de transmisión a otras personas.

Por estos motivos, la campaña del DMS 2013, se centra en la Promoción de la prueba del VIH, bajo el lema  “Juntos podemos lograr cero infecciones por VIH. Hazte la Prueba, con el objetivo de  detectar el 30% de casos que siguen sin diagnosticar. 

Enlaces para ampliar información:

Fuente: Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad
Fuente: OMS (Organización Mundial de la Salud)

lunes, 25 de noviembre de 2013

25 de Noviembre: Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres

La Administración Regional ha creado una amplia Red de recursos de protección a las mujeres maltratadas: Casas de Acogida, Centros de Urgencias, Centros de atención a mujeres jóvenes, Teléfono gratuito de atención 24 horas y programas de asistencia jurídico-procesal y psicológica.
Quizá, por ello, Castilla-La Mancha sea la región española donde menos denuncias por malos tratos se retiran una vez presentadas por las víctimas.



Eres víctima...
·         Cuando tu novio, marido o compañero te golpea, te insulta, te amenaza, te hace sentir humillada, estúpida, inútil...

Eres una mujer maltratada
·         Si te impide ver a tu familia o tener contacto con tus amigos, vecinos...
·         Si no te deja trabajar o estudiar.
·         Si te quita el dinero que ganas o no te da lo que precisas para las necesidades básicas de tu familia...  
·         Si te controla, te acosa y decide por ti...  
·         Si te descalifica o se mofa de tus actuaciones...  
·         Si te castiga con la incomunicación verbal o permanece en presencia de los hijos, invitándoles a no tenerte en cuenta...  
·         Si te impone el acto sexual    
Ante un ataque violento
·       Si puedes salir,
vete a la comisaría más próxima y haz la denuncia.
·       Si el ataque es inevitable,
procura convertirte en un blanco pequeño. Protégete con los brazos la cara y la cabeza.
·        Concierta con tus vecinos/as una señal
para que llamen a la policía cuando necesites ayuda.
·        Si no puedes llamar a la policía o te impide salir,
abre puertas y ventanas, grita, pide socorro y llama a los/as vecinos/as, ¡no te calles!
·        Ten siempre a mano
los teléfonos que puedas necesitar.
·        Haz todo el escándalo posible,
en ello está tu salvación.
·        Enseña a tus hijos/as
a conseguir ayuda y a protegerse cuando comiencen episodios violentos.
·        Acostúmbrate a no llevar adornos
como cadenas o colgantes que pueda utilizar para estrangularte.
·        Registra las situaciones de violencia vividas,
con fechas y detalles. Apunta los datos de las denuncias realizadas, si es posible nombre y número de identificación del/de la agente que hizo el trámite.
·        Retén los datos de todos los testigos
de cada agresión y de los/as que te atendieron.
·        Guarda todas las pruebas de la violencia:
ropa rota o ensangrentada, armas, objetos destruidos, etc.
·        Toma fotos de las heridas, marcas o moratones,
con una cámara que deje constancia de la fecha y anota los datos de la casa en que imprimas el material. 

Qué hacer
·       Solicita ayuda
en el Centro de la mujer, Centro de Servicios Sociales o trabajador/a social más próximo a tu domicilio.
·       Si existen lesiones,
dirígete al consultorio médico, centro de salud o al servicio de Urgencia de los hospitales. Solicita copia del informe médico o del parte de asistencia.
·       Si has sufrido agresión sexual,
has de solicitar, además, revisión específica por si existiese riesgo de embarazo y/o enfermedad de transmisión sexual y pide asesoramiento al respecto.
·       Denuncia los hechos
en el cuartel de la Guardia Civil, Policía local, comisaría de Policía o Juzgado de guardia. Facilita todos los datos posibles sobre las circunstancias en las que se produjo la agresión, sin ocultar ni omitir detalles. Haz constar si has sufrido antes malos tratos. Pide una copia de la denuncia.
·       Solicita protección y el alejamiento
del agresor en el juzgado correspondiente (Orden de Protección), que podrá ser acordada por el/la juez/a.
·       Si permaneces en casa,
toma las medidas de seguridad necesarias, procediendo al cambio de cerradura, de teléfono, denunciando cualquier acoso por parte del agresor... Y si acudes a casa de familiares, amigos, o a algún centro de acogida, no facilites direcciones ni confíes en los "intentos de reconciliación tras el arrepentimiento. Vas a encontrar ayuda. 
 

ATENCIÓN
·       Si corres peligro,
puedes abandonar el domicilio familiar sin que te suponga pérdida de derechos, siempre que en el plazo de 30 días se soliciten MEDIDAS PROVISIONALES, o DEMANDA DE SEPARACIÓN en el juzgado.
·       Si no puedes regresar a tu domicilio
y no tienes a dónde ir, pide ayuda. La Policía o la Guardia Civil te acompañarán a recoger tus cosas personales y te informarán sobre las CASAS DE ACOGIDA y CENTROS DE URGENCIA donde serás atendida y alojada con tus hijos e hijas si los tienes.
·       Al salir de casa procura llevar contigo:
libro de familia, DNI, pasaporte, cartilla y tarjetas de asistencia sanitaria, tu nómina y la de la persona con la que convivas, declaración de la renta, documentación bancaria y tarjetas de crédito, dinero, llaves, informes médicos, ropa, medicamentos, libros de escolaridad tuyos y/o de tus hijos e hijas, agenda de direcciones, permiso de trabajo (en caso de no tener nacionalidad española), escrituras de propiedad, permiso de conducir... 
 

ESPECIAL ATENCIÓN A LOS MENORES
Si tienes hijos y/o hijas, los malos tratos también les afectan. Los/as profesionales que te atienden han de valorar el estado en que se encuentran (de salud, de atención, de escolaridad). Igualmente les repercuten las medidas legales que se deriven de tu situación familiar: establecimiento de visitas del padre o prohibición de las mismas, derecho a pensiones por alimentos, protección social, etc.

Existen recursos específicos para menores, donde puedes acudir para solicitar información o atención especializada:
·         Trabajadores/as sociales.
·         Departamento de Menores en las Delegaciones Provinciales de Bienestar Social.
·         Unidades de Salud Mental Infantil y Juvenil.
·         Equipos multiprofesionales de los colegios.


Si quieres ampliar información entra en el la web del Instituto de la mujer de Castilla la Mancha:   http://www.institutomujer.jccm.es/
También puedes mandar un E-mail a:  institutomujer@jccm.es

Fuente: Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha

domingo, 17 de noviembre de 2013

Decálogo para vivir más, mejor y más feliz


Adoptar un estilo de vida saludable depende, en gran parte, de la propia persona. Somos nosotros mismos quienes tenemos la mayor responsabilidad sobre nuestra salud. Adquirir una conducta saludable, o cambiar una no saludable por otra que sí lo sea, es un proceso activo en el que usted debe ser el protagonista y con el que va a aprender cosas nuevas.

En el proceso de cambio hacia un estilo de vida saludable son muy importantes sus creencias y valores, así como sus experiencias propias: intente sacar provecho de ellas. También las relaciones y normas sociales tienen influencia en nuestros estilos de vida, sean estos saludables o no, y tanto el entorno social como físico pueden determinarlas. Piense en cómo afrontar las posibles dificultades.

Un estilo de vida saludable es imprescindible para cuidar y mejorar la salud, y siempre debe preceder y acompañar a cualquier tratamiento médico. Si usted ha decidido cambiar a un estilo de vida saludable: ¡Enhorabuena! Vivirá más, mejor y más feliz.

1. La alimentación debe ser:
·         Suficiente, para mantener o conseguir un peso saludable.
·         Variada, comer un poco de muchos alimentos para evitar la carencia de nutrientes.
·         Equilibrada, comer todos los días alimentos de todos los grupos.
·         Segura, no correr riesgos y elegir alimentos de origen seguro, con atención al envasado correcto e íntegro.
·         Apetecible, cocinar bien es un arte y hay que cuidarlo.
·         No hay duda: elegir la dieta mediterránea.

2. El consumo de alcohol debe ser:
·         Cuanto menos, mejor.
·         Nada en embarazadas, niños ni si se va a conducir. 

3. Realizar actividad física
·         Hacer ejercicio, adecuado a la edad y a la condición física de cada uno, de forma regular.
      ·         Cualquier actividad cuenta, como subir por la escalera, etc.
      ·         Se aconseja 1 hora diaria al menos 5 días a la semana. 






4. Evitar el consumo de tabaco y otras drogas
·         Dejar el tabaco. El consumo de tabaco, es la causa evitable más importante de enfermedad y muerte en nuestro país.
·         Evitar los espacios contaminados por el humo del tabaco, ya que el tabaquismo pasivo es causa de diversas enfermedades.
·         Ninguna droga es saludable. 

5. Hacer un consumo racional de medicamentos
·         Siempre bajo la supervisión de un sanitario cualificado y siempre acompañado de un estilo de vida saludable. 

6. Cuidar la salud sexual
·         En este campo no hay que correr riesgos innecesarios.
·         Si se ha tenido alguna conducta de riesgo, hay que hacerse un estudio. Si se padece alguna enfermedad de transmisión sexual, evitar contagiarla a otras personas.
·         Disfrutar del sexo con salud. 

7. No abusar de tomar el sol
·         Con media hora al día es suficiente para cubrir nuestras necesidades fisiológicas.
·         Las radiaciones solares se acumulan a lo largo de toda la vida, hay que protegerse adecuadamente. 
 
 

8. Conducir de una forma responsable
·         Abstención absoluta de alcohol si se va a conducir.
·         Usar el cinturón de seguridad en coches, el casco en motos y bicicletas, y las sillas para niños.
·         No usar el teléfono móvil cuando se está conduciendo. 

9. Tener una actitud positiva ante la vida
·         Tomarse las cosas con calma y evitar el estrés.
·         Descansar lo suficiente.
·         Buscar un sentido a la vida, una pasión, un propósito, una ilusión que nos impulse a levantarnos todos los días. 

10. Participar en la comunidad
·         Conectar con las demás personas, practicando la autoestima positiva.
·         Pertenecer a su comunidad. Una buena integración social y participativa, procurando tener unas relaciones sociales cordiales, nos ayudará en nuestra salud psíquica.
·         Reírse, la risa tiene poder curativo.


Fuente: Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria