El Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) ha
lanzado su campaña del Día Internacional de la Enfermera (DIE) 2023 de este año
“Nuestras
enfermeras. Nuestro Futuro.”, que
incorpora su Carta para el cambio de diez puntos y su informe relacionado.
La campaña del CIE “Nuestras enfermeras. Nuestro
futuro.” y su Carta para el cambio son muy oportunas considerando la reciente
declaración de la Organización Mundial de la Salud sobre el final de la
emergencia de salud pública de importancia internacional de la COVID-19, a
pesar de que muchos siguen enfermos y se están muriendo. Tras el daño intenso y
duradero de la pandemia, “Nuestras enfermeras. Nuestro futuro.” arroja luz
sobre un futuro más brillante para la enfermería, y nuestra Carta para el
cambio establece lo que hace falta para abordar retos de salud global y mejorar
la salud para todos.
En este día, el CIE recuerda a las numerosas
decenas de miles de enfermeras y otros trabajadores sanitarios que han perdido
su vida por la COVID-19, y aprovechamos esta oportunidad para recordarle al
mundo la gran cantidad de logros de las enfermeras y los numerosos sacrificios
que estas están realizando cada día para garantizar que las personas tienen
acceso a la atención de salud que necesitan, incluso en las situaciones más
inhóspitas y, en ocasiones peligrosas, en las que se encuentran.
La Carta para el cambio presenta diez acciones
políticas que los gobiernos y los empleadores han de emprender para crear y
sostener sistemas sanitarios seguros, asequibles, accesibles, con capacidad de
reacción y resilientes para que las enfermeras pasen de ser invisibles a
considerarse que tienen un valor incalculable.
Los argumentos para las diez acciones políticas
contempladas en la Carta para el cambio se encuentran en el informe del DIE,
que ofrece evidencia sobre por qué son esenciales para llevar al mundo, y a la
profesión misma, hacia la salud.
Las diez acciones políticas de la Carta para el
cambio del CIE son:
1. Proteger e invertir en la profesión de enfermería
para reconstruir los sistemas de salud.
2. Abordar y mejorar urgentemente el apoyo a la
salud y el bienestar de las enfermeras garantizando condiciones laborales
seguras y saludables, y respetando sus derechos.
3. Promover estrategias dirigidas a contratar y
retener a las enfermeras para abordar la escasez de fuerza laboral. Mejorar la
retribución de las enfermeras para garantizar un sueldo y beneficios justos y
dignos, así como defender entornos positivos para la práctica.
4. Desarrollar, implementar y financiar planes
nacionales para la fuerza laboral de enfermería con el objetivo de lograr la
autosuficiencia en la oferta de enfermeras en el futuro.
5. Invertir en programas formativos de alta calidad
acreditados para preparar a más enfermeras nuevas y mejorar el desarrollo de la
carrera profesional para las enfermeras existentes.
6. Empoderar a las enfermeras para que trabajen en
todo su ámbito de práctica de la enfermería fortaleciendo y modernizando la
reglamentación e invirtiendo en la práctica avanzada de la profesión y los
modelos de cuidados dirigidos por enfermeras.
7. Reconocer y valorar las habilidades,
conocimientos, atributos y experiencia de las enfermeras.
8. Colaborar activa y significativamente con las
asociaciones nacionales de enfermería como socios profesionales fundamentales
en todos los aspectos de las políticas sociosanitarias, la prestación de
servicios relacionados y el liderazgo.
9. Proteger a las poblaciones vulnerables, defender
y respetar los derechos humanos, la igualdad de género y la justicia social.
10. Nombrar a enfermeras líderes para puestos
ejecutivos en todas las organizaciones sanitarias y para la formulación de
políticas gubernamentales.
“La observación indica cómo está el paciente,
la
reflexión indica qué hay que hacer,
la destreza práctica indica cómo hay que
hacerlo.
La formación y la experiencia son necesarias
para saber cómo observar
y qué observar;
cómo pensar y qué pensar.”
Florence Nightingale, Notas sobre hospitales,
1863
Fuente: Consejo
Internacional de Enfermeras
